El otro día haciendo limpieza del armario de Mario salió una camiseta que le hice cuando era chiquitín, y que iba dejando en sus cajones porque me daba pena deshacerme de ella.
Se me ocurrió convertirla en otra cosa. En un cuadro para su habitación. Así la tendríamos por mucho tiempo más.
Usé el paspartú como referencia, para cortar un cuadrado alrededor del motivo.
Y con el paspartú también como base, pegué la camiseta al paspartú con un poco de cinta de doble cara estirando y centrando lo que pude.
Y ya está, sólo quedaba ponerlo en el marco y ponerle la trasera.
Paula
Ahhh pues mira, es original la idea!!!
ResponderEliminarOriginal y preciosa.
ResponderEliminarCuando el dibujo de la camiseta es tan bonito vale la pena conservarlo. Yo lo he hecho alguna vez ;)
ResponderEliminarBesitos!